
5 pasos para crear gráficos increíbles
Como Scott Berinato sugirió en el libro “Good Charts“, hacer buenos gráficos requiere adoptar un “pensamiento visual”. Adoptar un pensamiento visual significa comprender cómo vemos e interpretamos los elementos visuales. Primero, no seguimos un orden específico como al leer un texto. Por supuesto, tendemos a comenzar mirando la esquina superior izquierda, pero nuestros ojos van donde los elementos visuales destacan (texto en negrita, elementos resaltados, picos y valles en gráficos, intersecciones, valores atípicos, colores llamativos etc.). Segundo, solo podemos ver un número limitado de elementos visuales a la vez. Como regla general, a partir de entre cinco y diez elementos, ya no podemos identificar claramente elementos individuales, pero comenzamos a ver patrones globales o promedio. Tercero, siempre tratamos de buscar un significado, identificar patrones y sacar conclusiones de lo que vemos. Por lo tanto hay que prestar mucha atención para no transmitir mensajes que no queremos comunicar.
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1) ELIGE LA MEJOR SOLUCIÓN DISPONIBLE
La primera fase al crear un gráfico es pensar en lo que quieres comunicar. Ya habrás analizado tus datos, pero debes intentar olvidarte de ellos por un momento. No te limites por las restricciones de tus datos. También piensa dónde, cuándo y a quién le presentarás el gráfico. Es importante comprender claramente los motivos por los que vas a crearlo y presentarlo. En la segunda fase, comienzas a dibujarlo, preferiblemente en un papel.
Para ayudarte a identificar un gráfico que encaje, Scott Berinato sugiere escribir lo que quieres mostrar y tomar nota de las palabras clave utilizadas. En su libro “Good Charts“, presenta un ejemplo interesante: “Quiero COMPARAR EL NÚMERO de ofertas de trabajo con los empleados para VER la RELACIÓN para DIFERENTES TIPOS de trabajos”. Las palabras clave resaltadas en esta frase sugieren usar un gráfico para comparar las proporciones de diferentes categorías.

Si un gráfico está bien estructurado y los elementos están bien posicionados, mejora tanto su legibilidad como su estética. Las ventajas de un gráfico más fácil de entender son bastante claras, pero ¿qué pasa con la estética? Un gráfico “hermoso” tiene varias ventajas; por ejemplo, capta la atención de la audiencia, es más fácil de leer, parece más profesional y las conclusiones son más convincentes.
Comienza aplicando una estructura estándar con un orden y peso específicos de cada elemento: por ejemplo, título 12%, subtítulo 8%, área del gráfico 75% y fuente 5%. Finalmente, para mejorar el orden visual del gráfico, es recomendable respetar la alineación y los espacios en blanco como en el este ejemplo.
3) GUÍA AL USUARIO HACIA LA IDEA PRINCIPAL
Los elementos clave con los que puedes guiar al usuario hacia la idea principal son el contraste, el posicionamiento y otros elementos. El contraste funciona bien cuando tenemos algunos tipos de elementos de contraste para comparar (idealmente dos colores, dos formas, etc.). Es más fácil detectar un elemento azul entre muchos grises, pero es más difícil detectarlo entre muchos colores diferentes. Además del contraste, el posicionamiento se ha utilizado en el siguiente ejemplo, ya que los atributos se presentan en orden descendente a partir del rendimiento de nuestra empresa. La audiencia comenzará a mirar el gráfico por el elemento superior izquierdo. En este ejemplo, los artículos se ordenan verticalmente; en otros gráficos, puedes optar por ordenarlos horizontalmente.
Finalmente, elementos adicionales como el texto pueden ayudar a transmitir la idea principal, por ejemplo, haciéndola explícita en el título (por ejemplo, “Las ventas están disminuyendo en el último trimestre”) o agregando información adicional.
Otra técnica de posicionamiento es la modificación de puntos de referencia para enfatizar la idea principal. Por ejemplo, puedes eliminar puntos de referencia eliminando algunos detalles menos importantes para aclarar la idea principal. En el siguiente ejemplo, los grupos de edad se han reducido y los atributos se han agrupado por edad. Notarás que el segundo gráfico muestra claramente la división entre jóvenes y mayores.
4) ELIMINA ELEMENTOS INNECESARIOS
Cada elemento debe cumplir dos requisitos para mantenerse en el gráfico. Primero, debe ser útil para comunicar tu idea o, dicho de otra manera, sin este elemento no puedes transmitirla de manera clara. En segundo lugar, si hay otros elementos que sirven para lo mismo, este debe ser el más efectivo. Si este elemento es necesario y el más efectivo, pregúntate si puedes mejorarlo haciéndolo más efectivo o simplificándolo.
Algunas recomendaciones prácticas son:
- Elimina bordes, líneas de cuadrícula y marcadores de datos, o al menos hazlos menos visibles.
- Limpia las etiquetas del eje: el texto debe ser horizontal, los nombres deben tener una longitud adecuada (puedes usar abreviaturas) y los números deben tener el nivel de detalle apropiado (no uses decimales si la escala es sobre unidades, decenas, cientos, etc.)
- Mantén los marcadores de ejes al mínimo o elimina todo el eje si no es necesario (sería redundante si muestras las etiquetas de datos).
- Leyenda: puedes etiquetar series o categorías directamente en el área del gráfico en lugar de crear una leyenda debajo de él.
- No uses gráficos 3D.
- No repitas etiquetas de ejes en títulos o subtítulos; en su lugar, úsalos para mostrar la pregunta o la respuesta asociada con el gráfico.
- Pasa al fondo todos los elementos secundarios (por ejemplo, usa un color gris claro para ejes, y otros elementos menos importantes).
5) FACILITA EL PROCESO DE LECTURA PARA EL USUARIO
En el siguiente ejemplo, el gráfico se ha simplificado y mejorado. Primero, tener una leyenda con cinco colores implica un esfuerzo adicional para tu audiencia, que puedes reducir usando un eje x común con los diferentes años. En segundo lugar, puedes pasar de veinticinco barras a cuatro líneas, donde es más fácil resaltar lo que el gráfico pretendía resaltar: el número de matrimonios para aquellos que tienen un título de grado o más. Finalmente, se han eliminado los puntos decimales dado que no transmitían ninguna información adicional útil. Además de la simplificación, trata de ser consistente. Si comienza su presentación con algún patrón de color, mantenlo, de lo contrario, la audiencia puede confundirse. Además, si identificas una categoría con un color específico, mantenla durante toda la presentación (por ejemplo, el color utilizado para identificar a un competidor específico).
Recuerda que debido a los límites de nuestra memoria a corto plazo, solo podemos recordar de tres a nueve imágenes; así que cuantos más colores (u otros elementos) uses, más esfuerzo necesitará. Los únicos elementos que a veces pueden exceder este límite son barras y líneas, que podemos comparar fácilmente. Otro límite es el número de tonalidades de un color que podemos distinguir.

Este post se basa en un capítulo de mi libro “The Art of Data Analysis” y los principios y recomendaciones proceden de dos libros que recomiendo vivamente: “Good Charts” de Scott Berinato y “Storytelling con datos” de Cole Nussbaumer Knaflic.